Pre y perinatal

Se nace dos veces. Una por manos ajenas, la otra por decisión propia. Una es un acontecimiento de la naturaleza, la otra es un acontecimiento espiritual. El primer nacimiento es la salida del cuerpo materno hacia el mundo exterior. El segundo nacimiento es el ingreso a la propia esencia.    

Texto de Harab Elimelj Bar Shaúl

Acompañamiento terapéutico individual, de parejas y familias

Memorias tempranas: talleres de entorno uterino certificados por Castellino Training

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Te acompaño a explorar e integrar memorias tempranas de la vida intrauterina y el proceso de nacimiento.

Nuestra etapa temprana tiene un impacto significativo en nuestra conciencia. Muchos de los procesos orgánicos y psicológicos que atravesamos resuenan con vivencias adversas cuya huella se origina en nuestra concepción, vida intrauterina y proceso de nacimiento. Esas memorias implícitas son más que un fenómeno mental e influencian profundamente nuestro desarrollo físico, emocional y espiritual. Se albergan en nuestro sistema psico-corporal como sensaciones, comportamientos, sentimientos, creencias, posturas, micro y macro patrones craneales y de movimiento.

Nuestras improntas pueden despertar la sensación de falta de impulso o falta de protección y seguridad en el mundo, en nuestro entorno y nuestras relaciones.

Influyen en nuestro sentido de pertenencia.

En una exploración pre y perinatal accedemos a estas dinámicas más inconscientes para descubrir cómo siguen afectando nuestro sistema nervioso y (auto)percepción. 

Aprendemos a identificar las respuestas adaptativas que fueron necesarias pero que nos restringen en la actualidad y reorganizamos patrones corporales, emocionales y mentales que ya no nos sostienen. 

Imprint versus blueprint

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Al igual que conservamos improntas (imprint), siempre mantendremos conexión con la matriz original (blueprint), que es nuestra bio-inteligencia innata, diseñada para conectar y prosperar. 

Al abrirnos a la matriz original nos permite conectar con nuestro pleno potencial, acoger nuevas elecciones, así como enriquecer la relación con nuestra familia y entorno. Nunca es tarde para traer coherencia y amor donde hubo una interrupción o un dolor que nos sigue limitando en el presente, y vivir desde un lugar de más libertad y autenticidad.

Un proceso pre y perinatal puede tener como enfoque: 

  • explorar un patrón, una inercia o dinámica desafiante en nuestra vida actual (estancamiento, soledad, enfermedad, vínculos conflictivos, dificultad para concebir…) 

para descubrir cómo resuena con una vivencia temprana y abrir nuevas posibilidades.

  • explorar improntas de eventos que han ocurrido durante nuestra etapa intrauterina (útero tóxico, rechazo, duelo, pérdida de gemelo, influencias ancestrales…) o el nacimiento (improntas químicas de inducción y anestesia; improntas intervencionistas de fórceps, ventosa, cesárea…) o cuando ha habido un postparto difícil con falta de apoyo, problemas de lactancia, separación de madre y bebé 

para procesar lo que ha quedado incompleto, nutrir lo que no pudo darse y proteger lo que no fue respetado. 

  • integrar la vivencia del embarazo y nacimiento de nuestros hijos 

para fortalecer el vínculo entre todos los miembros de la familia.

  • sanar trauma transgeneracional  

para diferenciar y alinearnos con nuestro propio propósito.  

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Sesiones individuales

Exploramos las improntas tempranas que subyacen en las dificultades que estamos viviendo en el momento presente para recuperar salud, conexión, impulso y fluidez. 

Sesiones con parejas

Compartir desde una mirada pre y perinatal trae conciencia a las heridas primarias y de apego que puedan reflejarse en las dificultades en la relación de pareja.  

Sesiones con familias (bebés, niños y adolescentes)

El embarazo y el nacimiento son transformaciones profundas de la dinámica familiar y acompaño a cada uno de la familia para poder integrar la experiencia de dar y recibir vida. 

Ofrezco apoyo emocional y sesiones de biodinámica craneosacral durante el embarazo y postparto.  En el espacio postparto, el bebé es invitado a expresar sus vivencias y la escucha de sus sonidos, llantos, gestos y movimientos facilita integrar sus improntas pre y perinatales. La biodinámica craneosacral está especialmente recomendada cuando hubo estancamiento del bebé en el canal de parto o el nacimiento ha sido instrumentado (con posibles compresiones craneales causadas por fórceps, ventosa, cesárea), o si hay dificultades con la lactancia. 

Los padres reciben apoyo para navegar las vivencias de cansancio o posible frustración, ansiedad, culpabilidad, sentimientos de inadecuación, etc.  Con la llegada de la mater/paternidad a menudo emergen memorias implícitas de nuestras propias vivencias pre y perinatales que al procesarlas y diferenciarlas nos permite estar más en el momento presente y construir un vínculo más seguro con nuestros hijos.    

Desde el momento de la (pre)concepción el bebé es consciente del mundo que le rodea y es profundamente influenciado por el entorno uterino y familiar. Las respuestas que recibe in útero ante la búsqueda de contacto son importantes, ya que formarán en su psique pautas que influirán su manera de relacionarse con su entorno. Un vínculo seguro y protegido con los padres capacitará al niño para conectar de una manera sana con nuevas personas que entran en su vida posteriormente. En la vida adulta, los vínculos con la pareja, nuestras amistades y relaciones laborales reflejarán cómo hemos vivido esta etapa tan formadora.

Con niños el acompañamiento se crea a través del juego y el (con)tacto. 

Con adolescentes el poceso psicocorporal se da a través de la exploración de partes internas según el modelo de IFS (Internal Family Systems) y/o sesiones de biodinámica craneosacral. 

Talleres de entorno uterino certificados por Castellino Training

Ray Castellino desarrolló un formato de taller en el que 5 o 6 participantes tienen un espacio para explorar una intención en un entorno seguro y sostenido por los 8 siguientes principios: la bienvenida, apoyo mutuo y cooperación, elección, la pausa, contacto visual breve, toque y atención, autocuidado, confidencialidad. 

Al explorar improntas pre y perinatales podemos nutrirnos con estas cualidades que a menudo faltaban en nuestra etapa temprana. Por ejemplo porque nuestra llegada no pudo ser celebrada cuando fuimos concebidos sin un deseo muy claro o nacimos prematuros (bienvenida), hubo falta de capas de apoyo y conexión entre los padres (apoyo mutuo y cooperación), el embarazo o nacimiento conocieron un desenlace diferente de lo que los progenitores hubieron deseado (elección), con un ritmo acelerado por inducción o urgencia (la pausa), sin suficiente apoyo y conexión emocional y físico (contacto visual, toque y atención), falta de tiempo de descanso e integración (autocuidado) y respeto (confidencialidad) etc        

Cada participante recibe un espacio de dos horas (y media hora de compartir de integración) para establecer una intención acerca de lo que quiere enfocar durante su proceso de exploración.  La intención puede orientarse a integrar una impronta pre o perinatal que ya conoces, sospechas o intuyes (por ejemplo una impronta de intervención o separación) para poder vivir con más sensación de seguridad y conexión o la intención puede enfocarse a una dinámica actual en tu vida que te gustaría vivir con más apoyo, impulso y fluidez, sin saber con qué evento pre o perinatal podría resonar. 

“La verdad sobre nuestra infancia está guardada en nuestro cuerpo y, aunque podamos reprimirla, nunca podremos alterarla. Podemos engañar el intelecto, manipular nuestros sentimientos, confundir las ideas y hacerle trampa al cuerpo con medicamentos. Pero algún día el cuerpo nos presentará la factura, porque es tan incorruptible como un niño que, todavía íntegro de espíritu, no acepta componendas ni excusas y no dejará de atormentarnos hasta que dejemos de eludir la verdad.” 

Alice Miller

«No corras. Ve despacio, que donde tienes que ir es a ti mismo… y tu pequeño yo, recién-nacido eterno, no te puede seguir. Si vas deprisa, el tiempo correrá delante de ti como una mariposilla loca. Si vas despacio, el tiempo te seguirá como un buey manso.»

Juan Ramón Jiménez